Beneficios del yoga
El yoga como práctica ofrece una increíble cantidad de beneficios para la practicante. Desarrolla la fuerza muscular y ósea, al mismo tiempo que mejora la flexibilidad, la postura y el equilibrio.
Las posturas de yoga, como los torsiones, ayudan a mantener las articulaciones y los discos de la columna lubricados, lo que hace que funcionen mejor durante más tiempo.
La práctica regular de yoga apoya prácticamente todos los sistemas del cuerpo, incluidos el sistema circulatorio, el sistema reproductivo, el sistema respiratorio, el sistema inmunológico, el sistema endocrino, el sistema digestivo, el sistema linfático y el sistema nervioso central.
El yoga también ayuda a regular los procesos corporales, como los ritmos cíclicos responsables de nuestros ciclos de sueño/vigilia, nuestros ciclos menstruales mensuales y nuestras reacciones internas a las estaciones.
También se producen beneficios mentales/emocionales, como sentimientos de calma, mejora de respuesta ante factores estresantes y claridad mental.
Lo que diferencia al yoga para la fertilidad como práctica es qué posturas y prácticas elegimos hacer y, a veces, cuáles elegimos no hacer. En yoga para la fertilidad, elegimos centrarnos en aquellas posturas y prácticas que nos ayudan específicamente a prepararnos para la ovulación, la concepción y el embarazo.
Para comprender más acerca de cómo estos pueden ayudar a mejorar la fertilidad, veamos cada beneficio con mayor detalle.